EN MI NOMBRE, NO

Por enésima vez nos concentramos anteayer más de un millón de españoles para exigirle al Gobierno que no hable con los del zulo y el tiro en la nuca, para que mire a los ojos a las víctimas y no a Batasuna-ETA. Daba igual por donde acudieras a la Plaza de Colón: por Jorge Juan, no cabía ni un alfiler, así, literalmente; por la Castellana, una marea humana se apelotonaba intentando estar lo más cerca posible del escenario donde iba a hablar Alcaraz sobre dignidad, sobre muertos, y, en definitiva, sobre por qué ninguno de los que estábamos allí queremos que se negocien nuestras libertades con terroristas. En este nuevo récord de convocatoria de la AVT, se escucharon voces que pedían que no se ceda al chantaje de la ETA, que se investiguen los agujeros negros que rodean el 11M, que se deje de mirar a las víctimas como un estorbo mientras se mira a los terroristas "a los ojos".

No voy a entrar en la guerra de cifras: los que allí estuvimos sabemos hacer un cálculo aproximado de la participación y es MENTIRA que solo hubiese doscientas y pico mil personas. Allá el Delegado del Gobierno y los que se quieran dejar engañar por él.

Ha dicho un miserable llamado Suso de Toro que "Madrid se ha convertido en una ciudadela de la extrema derecha" y atribuye el éxito de la concentración de la AVT a que "Madrid está tomada por la extrema derecha". Este execrable personaje pseudoprogre califica por lo tanto de fascistas a las víctimas del terrorismo. A ver si se enteran de una puñetera vez: son concentraciones a favor de los M U E R T O S, para que se respete su memoria, para que su muerte no sea en vano, porque, precisamente ellos que han muerto, son los más interesados en que ETA deje de matar, una actitud admirable por cierto. Ah y tanto que gustan en esa central de vertidos informativos tóxicos de repartir carnets de fascista, no se olvide de Montilla, que comprende que agredan e insulten a Rajoy cuando pretende dar un mítin en contra del Estatut.